Los suelos laminados se han convertido en una excelente solución para obras nuevas y rehabilitaciones de pisos, casas, oficinas, locales comerciales y cualquier otro espacio, por ser un revestimiento de muy alta calidad. Por tanto, es importante saber como limpiar el suelo laminado. Este ofrece una gran variedad de ventajas entre las que destacan:
- Amplia gama de modelos, colores y terminaciones.
- Ofrecen una mejor relación costo – calidad que otros tipos de suelos, por ejemplo, el parque de madera, además permiten crear el mismo efecto con un coste más bajo.
- Para su instalación no se requiere retirar el antiguo pavimento o solera.
- Son de alta resistencia y se pueden colocar en lugares con alto tráfico de personas, como en comercios y tiendas, gracias a su resistencia a impactos, arañazos, agua y productos químicos.
- La exposición a la luz solar no afecta su color.
- Son adecuados para instalar suelo radiante.
- Brindan calidez y confort a los espacios y van muy bien con cualquier estilo decorativo.
- Son muy fáciles de limpiar y se mantienen como nuevos por mucho más tiempo.
Esta última característica de los suelos laminados los hace muy atractivos, ya que no requiere de mucho trabajo para mantenerlos muy limpios y con su brillo natural, por ello hemos querido dedicar este artículo a explicar en detalle cómo limpiar el suelo laminado, cómo desmancharlos y cuáles son los mejores productos para su limpieza.
Pasos para una adecuada limpieza del suelo laminado
La limpieza del suelo laminado es un proceso sencillo y fácil de realizar. Sin embargo, para obtener mejores resultados es conveniente seguir estos pasos:
Paso 1: retira con cuidado la suciedad acumulada en el suelo laminado, puedes utilizar el aspirador en modo suelo, así quitarás fácilmente arena, polvo y pelusas. No utilices el cepillo giratorio. Si no tienes aspirador puedes barrer el piso con un cepillo suave, recoger la suciedad y luego pasar una mopa de microfibra húmeda.
Paso 2: luego de que el piso está limpio, ahora debes fregarlo, puedes utilizar limpiadores para suelos laminados o una mezcla de vinagre y agua, aplica la solución al suelo con un pulverizador y pasa la mopa de microfibra, para fregar, humedece la mopa o fregona y pásala, muy bien por toda la superficie del suelo laminado.
Paso 3: luego de fregar el suelo laminado, es recomendable secarlo con un paño de microfibra limpio, esto ayudará a resaltar su brillo natural.
¿Con qué frecuencia limpiar el suelo laminado?
Un aspecto importante de la limpieza de los suelos laminados es cada cuánto tiempo debe realizarse, como empresa de limpieza recomendamos considerar algunos factores como:
- Número de personas que transitan a diario por el suelo laminado.
- Cantidad de niños pequeños y mascotas que usan el suelo laminado.
- Tipo de estancia donde está ubicado.
- Estación del año.
Cuando se trata del suelo laminado de una casa o piso donde no hay niños pequeños o mascotas, bastará con aspirarlo o barrerlo cada tres días y fregarlo una vez a la semana. Pero, cuando hay niños pequeños y mascotas es común que se tenga que limpiar a diario.
Una forma de minimizar la frecuencia de limpieza del suelo laminado es tener la costumbre de quitarse los zapatos al entrar a casa, esto evita en gran parte suciedades como hojas secas, arena, piedrecillas barro, agua y el chicle, que se adhiere al suelo y puede manchar el piso.
¿Cuáles son los mejores productos para limpiar este tipo de suelo?
Una de las ventajas que ofrece el suelo laminado es que puede limpiarse con una solución de agua y vinagre y queda muy limpio y reluciente, además el vinagre ayuda a eliminar las manchas, solo necesitas diluir una tapa de vinagre por litro de agua y ya tienes un poder limpiador. Pero, también existen otras opciones muy interesantes que puedes emplear:
Limón: puedes colocar en el agua de fregar un poco de zumo de limón, te ayudará a limpiar de forma profunda y le da al ambiente un buen aroma.
Productos de limpieza para suelos laminados: en el mercado actual puedes encontrar diversos productos de limpieza especialmente formulados para suelos laminados, son una excelente opción para mantenerlos muy limpios y no les causan ningún daño.
¿Qué no debes utilizar?
- Jabón o soluciones jabonosas.
- Sistema de limpieza a vapor.
- Limpiadores que contengan abrasivos fuertes.
- Aspiradoras con cepillos giratorios.
- Productos de limpieza que contengan aceites. ceras, abrillantadores, disolventes o lejía, debido a que pueden formar una película opaca en el suelo laminado.
- Abrillantadores u otros productos que deben frotarse, ya que pueden afectar el brillo natural del suelo laminado.
- Lanas de acero o cepillos con cerdas muy duras.
Recuerda que utilizar un producto adecuado para limpiar el suelo laminado ayudará a que se mantenga en óptimas condiciones por mucho más tiempo, lo que indica que si limpias apropiadamente el suelo laminado su vida útil se alargará, lo que te ahorrará costos considerables.
Suelo laminado con Manchas
A pesar de que suelo laminado es muy fácil de limpiar, en ocasiones puede mancharse y hay ciertas manchas que pueden ser más difíciles de sacar, seguidamente contamos cómo quitar de forma fácil algunas de las manchas más comunes en los suelos laminados:
- Manchas producidas por líquidos: cuando se derrama leche, refresco, cerveza o vino, lo más recomendable es limpiarlo enseguida con papel absorbente o una bayeta húmeda, si se deja que el líquido se seque sobre el suelo puede crear una macha, en caso de que se produzca puedes limpiarla con una solución de agua vinagre o con un limpiador específico para suelos laminados.
- Manchas producidas por cosméticos: los esmaltes y labiales pueden causar manchas en el suelo laminado que tienden a ser difíciles de sacar, para hacerlo de forma eficiente aplica un poco de alcohol sobre la mancha, deja actuar por unos segundos y luego pasa una bayeta humedecida con agua, puedes agregar al agua unas gotas de limón.
- Manchas producidas por las zapatillas; las zapatillas con suelas de goma tienden a dejar manchas sobre el suelo laminado que son muy antiestéticas, puedes eliminarlas en seco frotando suavemente en seco un estropajo de nailon sobre la mancha, luego pasa una bayeta humedecida con agua.